La práctica de la anestesia regional tiene ventajas en comparación con la anestesia general y sus posibles complicaciones en pacientes de alto riesgo (fallas cardiacas y respiratorias), ya que solo se aíslan los terminales nerviosos de las zonas del cuerpo en las cuales se necesita hacer algún tipo de procedimiento. La anestesia regional también tiene diversas aplicaciones en el tratamiento del dolor crónico. La realización de bloqueos nerviosos se lleva a cabo por un especialista con un alto grado de entrenamiento y experiencia, por lo cual el procedimiento es operador-dependiente, lo que conlleva a que el éxito de un bloqueo nervioso esté relacionado directamente con la habilidad particular del especialista. El enfoque general del bloqueo de nervios (PNB) consiste en la administración de un anestésico en la proximidad de estas estructuras nerviosas, la difusión del anestésico a través del nervio impide su conducción eléctrica por bloqueo de canales de sodio y de esta manera la transmisión de información nociceptiva que viaja hasta el sistema nervioso central.
Para realizar un bloqueo nervioso exitoso, el especialista debe ubicar con exactitud la estructura nerviosa alrededor de la cual se desea aplicar el anestésico. Para ubicar dicha estructura, se utilizan técnicas como marcas anatómicas y estimulación eléctrica, siendo la primera de ellas poco precisa debido a las variaciones anatómicas de paciente a paciente y la segunda de ellas por ser una técnica invasiva. Es por esto que en años recientes se ha incursionado en la realización de bloqueos nerviosos asistidos por ultrasonido, permitiendo de esta forma al especialista una visualización en tiempo real de una imagen del plano anatómico correspondiente a la estructura nerviosa objetivo.
La tecnología de ultrasonido y sus recientes avances ha permitido que la práctica de la anestesia regional asistida por la misma, no requiera que los médicos que la practican tengan un conocimiento profundo de los detalles técnicos del equipamiento de ultrasonido, lo cual ha llevado a la realización de procedimientos anestesiológicos más exitosos. Sin embargo las imágenes ultrasónicas son en algunos casos difíciles de interpretar aún para el especialista y la identificación de las estructuras nerviosas dentro de la imagen en la mayoría de casos se dificulta debido a las características propias de este tipo de imágenes.
Desde el punto de vista del procesamiento de imágenes, el trabajo con ultrasonido tiene ciertos aspectos desafiantes a partir de las características propias de esta tecnología de adquisición. Para llevar a cabo una identificación efectiva de las estructuras anatómicas presentes en una imagen de ultrasonido, se deben realizar diferentes etapas de procesamiento que permitan una diferenciación clara de todas las regiones dentro de la imagen. Las tecnologías de adquisición de imágenes médicas introducen ruido y artefactos en las imágenes que deben ser atenuados, sin eliminar o destruir los detalles anatómicos relevantes para el punto de vista clínico. En la reducción de ruido en imágenes médicas, se debe realizar un equilibrio entre la reducción del ruido y la preservación de las actuales características que son relevantes para la intervención o el diagnóstico, dicho procedimiento no puede ser llevado a cabo utilizando técnicas convencionales de eliminación de ruido en imágenes ya que las imágenes ecográficas están afectadas por un ruido de tipo multiplicativo acústico (conocido como ruido speckle), que en algunos casos contiene información relevante desde el punto de vista clínico.