A veces llegan cartas: Editorial introduccion.

En nuestro papel de servidores públicos ejercemos funciones para las que nos habíamos preparado  con esfuerzo y disciplina,  y realizamos otra gran cantidad de acciones que jamás habíamos calculado pero aun así son obligatorias si queremos obtener los resultados propuestos.

 

En estas últimas encaja justamente la gestión documental que tenemos como labor accesoria, que se debe ejecutar sin mayores conocimientos previos y lo más cruel sin tiempo ni interés para comprenderla y asumirla.

 

Por fortuna no todo es penoso, se trata de una apropiación para la cotidianidad laboral  que beneficia muchísimos aspectos de nuestra vida personal, por lo tanto la asimilación de características básicas en los documentos nos conducen a ser eficaces en su producción y trámite, además de permitirnos la detección de vacíos de fondo en tanto que somos sujeto de la gestión.

 

Vamos entonces en este espacio a revisar de manera sencilla  y breve diferentes omisiones, muy comunes por cierto, y sus posibles consecuencias en el sentido de la misiva.  

 

Los temas tratados corresponden a situaciones reiteradas en la ventanilla única institucional, requerimientos normativos, visitas de inspección en archivos de gestión entre otros casos, no obstante confiamos en que se convierta en una reflexión bienintencionada, puntual y  válida incluso si no nos hemos visto comprometidos todavía.

 

Entremos pues en materia:

 

Cuando solicitamos una autorización……

 

Nos vemos en la próxima. Sean bienvenidas y bienvenidos.

Última actualización: Jueves, Octubre 02, 2014 08:32 AM