El Consejo Académico de la Universidad Tecnológica de Pereira, lamenta y rechaza enérgicamente los actos de vandalismo que se presentaron el día de ayer en el campus y sus alrededores.

En especial rechazamos el ataque realizado a la casa del Coronel de la Policía, el incendio a la motocicleta del guarda de tránsito, y las heridas ocasionadas a un estudiante que hace parte del grupo de derechos humanos de la universidad, y que al parecer fue herido por los encapuchados que lideraban los actos vandálicos.   Además de la grave afectación a la movilidad en las vías aledañas, los daños a bienes públicos y privados, y el riesgo al que estuvieron sometidos vecinos del sector y de la comunidad universitaria, ante el caos que pretendieron crear los encapuchados, y que no obedecía a ninguna reivindicación manifestada.

El país está en un proceso complejo de implementación del Acuerdo de Paz, la Universidad debe ser un territorio de paz, un escenario de deliberación y debate, y de ninguna manera se pueden tolerar actos violentos que atenten y pongan en riesgo la vida de las personas, así como el patrimonio público y privado.  Hacemos un llamado a las vías de diálogo, la razón debe primar sobre cualquier acto de violencia, porque este último de ninguna manera puede ser la excusa para la reclamación de derechos.

Es pertinente recordar que este Consejo Académico apoyó en su momento el movimiento estudiantil en sus justas demandas a fines del año 2018, y hoy hacemos un llamado a todos los estamentos de la comunidad universitaria a no ser indiferentes ante la gravedad de los hechos,  rechazar estos actos violentos que son de unos pocos, y no representan el sentir de todos los estamentos de nuestra universidad, y a privilegiar el diálogo y el respeto a los demás por encima de intereses distintos a los que deben acompañar a nuestra universidad. 

Expresamos nuestra solidaridad a todos los afectados, y solicitamos que se adelanten las averiguaciones de los hechos antes referidos y de ser conducentes las investigaciones a que haya lugar, con todas las garantías que debe brindar nuestro estado de derecho, y que estas no conduzcan a estigmatizar el papel del movimiento estudiantil y sus líderes reconocidos. 

Igualmente invitamos a todos nuestros directivos, docentes y estudiantes, a liderar acciones pedagógicas al interior de campus que permitan consolidarnos como territorio de paz.

Pereira 16 de octubre de 2019